24/9/09

Los dentistas pueden detectar tempranamente casos de maltrato infantil

El abandono dental se define como el continuo incumplimiento de atención básica sobre las necesidades orales del niño. Esta carencia puede tener repercusiones muy negativas sobre su salud, como dolor agudo, pérdida de sueño y reducciones de peso y de crecimiento.

Esta clase de abandono puede indicar otro tipo de negligencia y abuso infantil de lo que el dentista debe informar si tiene conocimiento.

Peter Sidebotham, de la Universidad de Warwick, Inglaterra, es uno de los autores del documento que establece esta nueva capacidad de los dentistas, el primero en Europa. "Existen evidencias de que un niño desatendido tiene más afecciones dentales que sus hermanos atendidos. Y muchos dentistas son conscientes de su capacidad para formar parte en la protección del menor, pero el problema es que aún encuentran dificultades para poner en práctica todo lo que saben cuando sospechan de esos malos tratos", asegura Sidebotham.

"Estoy impresionado por todo lo que hacen los dentistas para aconsejar a los padres. Pero cuando se trata de un niño que sufre, siempre deberé animarles a pedir consejos a otros profesionales de la salud con experiencia en casos similares y, si fuera necesario, emitir un referido de protección infantil", afirma. (DM)

12/9/09

La amoxicilina puede causar fluorosis dental


La amoxicilina es una penicilina sintética que se usa para tratar ciertas infecciones causadas por bacterias sensibles a este antibiótico (por ejemplo , infecciones a garganta, nariz y oídos, infecciones del tracto respiratorio inferior, infecciones genitourinarias sin complicaciones urológicas, infecciones de la piel y los tejidos blandos, infecciones odontoestomatológicas…). Es muy común que se recete a niños con problemas de infecciones en los oídos y otras enfermedades bacterianas.

Un estudio publicado en Archives of Pediatric and Adolescent Medicine, alerta del peligro de recetar amoxicilina a los bebés, por el riesgo de lesiones al esmalte (fluorosis dental).

En este estudio participaron 579 bebés y fueron seguidos desde su nacimiento hasta los 32 meses. Los resultados indicaron que un 75% de niños habían tomado amoxicilina a los 12 meses de edad, mientras que el porcentaje se elevaba hasta el 91% cuando se preguntaba a los 32 meses.

Se observó también que un 24% de los pacientes presentaba fluorosis en ambos incisivos centrales superiores.

Los investigadores indican que tomar amoxicilina desde los 3 a los 6 meses aumentaba significativamente el riesgo de fluorosis en los incisivos centrales superiores. Estos resultados sugieren un nexo entre el uso de amoxicilina durante la infancia y el desarrollo de defectos en el esmalte de la dentición permanente.

El Dr. Steve M. Levy, director de salud pública dental de la Universidad de Iowa, indica que los hallazgos alcanzados deberán tomarse en cuenta cuando se recete amoxicilina a niños pequeños. No es cuestión de prohibirla, sino de recetarla apropiadamente y de tener en cuenta este posible efecto secundario. Además indica que “en este momento, se trata de una curiosidad estadística y no debería llegarse a ninguna conclusión antes que se realicen más estudios”.

11/9/09

El sueño de la tercera dentición esta cerca

La experiencia fue realizada por un equipo de la Universidad de Ciencias, de Tokio, dirigido por Etsuko Ikeda, y se publica en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America. El informe empieza por recordar que “el principal propósito de la terapia regenerativa es desarrollar, mediante bioingeniería, órganos totalmente funcionales, capaces de reemplazar a aquellos perdidos o dañados por enfermedad, lesión o envejecimiento”. Advierte que “estas tecnologías todavía no alcanzaron reconstrucciones en tres dimensiones de órganos plenamente funcionales”: ellos afirman haber logrado una reconstrucción tridimensional, con el diente de ratón. “El reemplazo dentario por terapia regenerativa es un modelo confiable para evaluar la futura aplicación clínica del reemplazo de órganos mediante bioingeniería”, sostiene el informe.

Pero, ¿cómo se fabrica un diente de verdad? “La estrategia para desarrollar un ‘tercer diente’, tras la pérdida de los dientes temporario y permanente, consiste en reproducir el proceso que ocurre durante el desarrollo embrionario: se reconstruye, en laboratorio, por bioingeniería, un ‘germen dentario’.” En los embriones, a cierta altura de su desarrollo, se van diferenciando células que darán lugar a los distintos órganos: un “germen dentario” producirá un diente y no otra cosa. Los investigadores obtuvieron las células correspondientes a un germen de molar a partir de un embrión de ratón de 14 días de desarrollo y las cultivaron en laboratorio durante una semana, luego de lo cual “un germen de muela fue trasplantado, con la correcta orientación, en un alvéolo de la región molar superior de un ratón adulto, cuyo primer molar superior había sido extraído tres semanas antes”. A los 36 días de la implantación, “la cúspide del diente apareció en la cavidad oral”.

“El diente regenerado logró una normal oclusión (cierre de la dentadura) con el diente opuesto natural, y en armonía con los otros dientes del animal receptor”, y “el potencial masticatorio se ubicó dentro de los rangos normales”. Sin embargo, “el tamaño del diente obtenido por bioingeniería fue más pequeño que el de los otros dientes”, reconocen los investigadores.

Además, se logró que “las fibras nerviosas del organismo de los animales receptores ingresaran en la pulpa del diente obtenido por bioingeniería” y “esos nervios fueron capaces de transportar señales de estímulos”; el organismo receptor también hizo llegar vasos sanguíneos para la nutrición de su nuevo diente.

“En conclusión, este estudio brinda evidencia del exitoso reemplazo de un órgano completo y funcional en un organismo adulto, por medio del trasplante de un germen obtenido por bioingeniería, reconstituido a partir de la manipulación in vitro de una sola célula. Nuestro estudio hace una contribución sustancial al desarrollo de tecnología en bioingeniería para la futura terapia de reemplazo de órganos”, sostiene el equipo de la Universidad de Tokio.

El biólogo Marcelo Rubinstein –profesor titular en la UBA e investigador principal del Conicet– destacó “el gran interés” despertado por el estudio de la Universidad de Tokio: “El futuro de esto es el hombre biónico –dijo, no del todo en broma–, que podrá obtener reemplazos de muy diversos órganos”. Observó, sin embargo, que, para que el experimento efectuado en ratones pueda aplicarse a seres humanos, hace falta un paso que todavía no se dio.

“En los ratones –explicó Rubinstein–, el implante se hizo a partir de embriones, extraídos de un útero, genéticamente idénticos al receptor; son cepas de ratones preparadas para que sean como gemelos”, observó. “Tratándose de seres humanos, habría que partir de una célula del paciente que recibirá el implante y, primero, ‘reprogramarla’ para que vuelva al estado indiferenciado de stem cell, célula madre, capaz de transformarse en cualquier célula del organismo. Esto ya podemos hacerlo. Pero a esa célula madre habrá que hacerla ‘avanzar’, mediante estímulos adecuados, para que se convierta en germen dentario: una célula capaz de generar un diente y sólo eso. Este último paso todavía no fue dado por la ciencia.

Por el momento habrá que contentarse con los implantes dentales, que por el avance de la tecnología en la fabricación de nuevos materiales están dando buenos resultados.

Fumar demasiado causa pérdida del gusto


Un estudio publicado en Ear, Nose and Throat Disorders indica que los fumadores tienen menos papilas gustativas.

Pavlidis Pavlos dirigió un equipo de investigadores de la Universidad Aristóteles de Tesalónica (Grecia) que usó estimulación eléctrica para determinar el umbral de gusto de los soldados y endoscopios para medir el número y la forma de un tipo de papilas gustativas llamadas papilas fungiformes. “Estadísticamente, fueron detectadas importantes diferencias entre los umbrales de gusto de los fumadores y los no fumadores. También fueron observadas diferencias relativas a la forma y la vascularización de las papilas fungiformes”, dijo Pavlos.

En los fumadores al hacerles un examen endoscópico se encontró que sus papilas fungiformes estaban planas con un reducido suministro de sangre. Según concluye Pavlos, “la nicotina podría causar alteraciones funcionales y morfológicas de las papilas, así como su posterior perdida”.

Fuente: DM Londres

Hallan nuevos tipos de bacterias en la boca humana


Investigadores del Instituto Dental del King’s College de Londres han descubierto nuevas especies de bacterias en la boca, lo que ayudaría a explicar la caída de las piezas dentales y las enfermedades de las encías y mejoraría tratamientos actuales.

William Wade, coordinador del estudio afirma que “la boca alberga una gran variedad de microbios, como virus, hongos, protozoos y bacterias. Estas últimas son los más numerosos; existen 600 tipos de bacterias y casi la mitad no tienen denominación todavía, por lo que estamos intentando describirlas”.

Los científicos han estudiado el tejido de la boca, así como los tumores en esta región y han encontrado tres tipos de bacterias Protovella histicola relacionadas con enfermedades e infecciones de otras partes del cuerpo. “Curiosamente, estas especies han estado aisladas de los tejidos de la boca dentro de los tejidos de la zona, tanto en cánceres de boca como en tejido bocal sano, lo que confirma que las bacterias bucales pueden invadir tanto tejidos como células individuales.

La caída de las piezas dentales y la enfermedad de las encías son las enfermedades bacterianas más comunes en el hombre y se producen por cambios en los microbios de la boca. Sin embargo, para poder entender las enfermedades de la boca hay que descifrar cuáles son cada una de las bacterias que habitan en ella y cuál es su papel. (DM)

Pacientes jóvenes no necesitan antibioticoterapia en exodoncias

La prescripción de antibiótico preventivo en exodoncias a pacientes jóvenes con terceros molares inferiores submucosos o en posición vertical no está justificada, si bien la probabilidad de infección de esta intervención aumenta con la edad del paciente. Es la conclusión de la tesis doctoral de María Antonia Díez, de la Facultad de Farmacia de la Universidad del País Vasco en España, que ha merecido el Premio a la Mejor Publicación Científica sobre Uso Racional de Medicamentos de la Fundación Vasca de Innovación e Investigación Sanitaria.

La tesis se titula Ensayo clínico sobre la eficacia de la amoxicilina/ácido clavulánico frente a placebo en la prevención de infección postoperatoria tras la exodoncia de terceros molares inferiores (TMI) incluidos y ha sido dirigida por Joseba Santamaría, jefe del Servicio de Cirugía Máxilo-Facial del Hospital de Cruces, en Vizcaya, y catedrático de Patología Médico-Quirúrgica Bucal de la Universidad del País Vasco (UPV); Luis Barbier, médico adjunto del Hospital de Cruces, e Itziar Arteagoitia, estomatóloga y profesores también de la UPV.

Uno de los objetivos que con más ahínco se busca en la práctica de exodoncias de TMI es la reducción de las infecciones. La nueva doctora vio que no existía evidencia científica, a favor o en contra, respecto a la utilización rutinaria de antibióticos sistémicos en la prevención de infecciones tras esta intervención quirúrgica.

Muestra hospitalaria

Según Santamaría, "se trataba de dilucidar con una muestra de 500 pacientes del Hospital de Cruces si era o no necesario prescribirlos".

Los resultados indican que "no está justificada la prescripción de antibiótico preventivo a los pacientes jóvenes, con terceros molares inferiores submucosos, así como cuando los terceros molares inferiores se presentan en posición vertical".

Estas situaciones suponen aproximadamente el 33 por ciento del total de las exodoncias de TMI incluidos. El trabajo apunta a la "conveniencia de emplearlos cuando los terceros molares están en situación de inclusión profunda". Otro resultado relevante es que "se ha establecido el riesgo que existe en función de la edad del paciente, ya que se observa que se produce un incremento del 8 por ciento de la posibilidad de infección con cada año de edad.

Teniendo en cuenta que los porcentajes de infección, según los estudios, "oscilan entre el 3 y el 25 por ciento" y que "entre el 20 y el 80 por ciento de los cirujanos utilizan rutinariamente antibióticos sistémicos en la exodoncia de TMI", se trata de un "estudio de gran importancia para el uso racional del medicamento".

En concreto, "la implantación de esta vía clínica supone un ahorro importante en la antibioterapia profiláctica, ya que para librar a un paciente de una infección hay que tratar con antibiótico a otros 16 pacientes más; es decir, el número necesario de pacientes a tratar es 17". Asimismo, también se reduce el riesgo de que los pacientes puedan automedicarse con antibióticos, "y de que se produzcan reacciones anafilácticas a los antibióticos, que las hay". (DM)

El uso del enjuague con colutorios es otro factor causante del cáncer bucal


Los enjuagatorios bucales se usan para eliminar bacterias patógenas de la boca, pero no son selectivos, atacando organismos que sí son beneficiosos. El usarlo más veces de lo debido, puede agredir tejidos que no estén preparados para soportar tal nivel de irritación.

Los últimos estudios indican que el riesgo se multiplica en aquellos enjuagues que contengan alcohol. Por este motivo se recomienda que se use no más de dos veces al día.

El cáncer de boca es uno de los más mortales de todos los tumores. El porcentaje de supervivencia se sitúa sólo en el 50 por ciento. Los malos hábitos de vida tienen un factor decisivo a la hora de contraer la enfermedad. El uso desmesurado de enjuagatorios y además el tener hábitos de fumar y beber alcohol multiplican el riesgo.

El cáncer oral es evitable. Diagnósticado con precocidad tiene un índice de curación elevado. Para prevenirlo es necesario abstenerse del tabaco y el alcohol en la medida de lo posible. inclusive el tabaco de mascar también es muy perjudicial y es causa directa de esta patología.

Se recomienda visitar al dentista dos veces al año como mínimo, ya que el especialista puede diagnósticar cualquier alteración no solo en tejidos duros (dientes) sino también en tejidos blandos de la boca. Así, si se detecta alguna lesión sospechosa podrá evaluarse como cancerosa, precancerosa o sana mediante un test superficial, rápido e indoloro. ( DM)

Fresas inteligentes evitarán dañar la dentina sana

El sistema de fresas Smart-Bur II de SS White permite algo único: determinar con precisión de la eliminación de caries. Este sistema de...